Murió Helen Gurley Brow editora de Cosmopolitan

Hoy te voy a hablar de Helen Gurley Brow.

Hubo una época, hace mucho, mucho tiempo, donde las mujeres no tenían voz o voto, en su vida personal, laboral y mucho menos en sus relaciones.

Pocas tenían el privilegio de elegir marido o estar solteras si así lo querían.

Aunque no lo crean eso no pasó hace tanto, y de hecho en algunos países algunas mujeres aún viven de esa manera.

Sus padres eligen su vida y luego pasa a ser responsabilidad de su marido.

Pero bueno sigamos, hace muchos años, las mujeres tampoco podían estudiar o trabajar. Al menos en lo que ellas quisieran.

Sí, siéntete privilegiada, porque esa sí que fue una época complicada. Muy, muy complicada si me lo preguntas.

Las cosas en el último siglo han cambiado mucho para la mujer, y por allá en 1922 nació Helen Gurley Brow.

Una chica menuda que cambiaría la visión de la mujer en cuanto a su sexualidad y las relaciones con el sexo opuesto.

Tal vez no sería la única. Estoy segura que hubo muchas y miles en cada país.

Lo que caracteriza a esta mujer en particular, es que no se casó hasta los 37 años.

Y ¿por qué la sorpresa? porque ella vivía en una época donde las mujeres se casaban más jóvenes y normalmente tenían dos metas: un buen matrimonio y ser buenas madres de familia.

Pero ella fue la excepción.

Tuvo una vida sexualmente activa, y gracias a sus experiencias realizó un libro que publicó en 1962 titulado: “El sexo y la mujer soltera”.

Este libro ayudó a muchas mujeres. Se le conoce como la precuela “inocente” de Sexo en Nueva York.

Otro hecho que marcó su vida, fue que en 1965 empezó a trabajar, como editora jefe, de la revista Cosmopolitan.

Una de las revistas más importantes de Estados Unidos, que empezó en el año 1886.

Sin embargo, al principio era una revista familiar, literaria, pero a inicios de la década de 1970, Cosmopolitan se convirtió en una revista femenina con la llamativa portada de una alguna mujer, usualmente en un vestido corto o en bikini.

Algo demasiado llamativo para la época y que generó una gran revolución en el país de la libertad y los derechos de libre expresión.

Helen recibió múltiples criticas, pero supo sortearlas y siguió con su idea de darle un giro total a la revista, que pudiera ser un escaparte para ayudar a las mujeres.

En esta revista empezó a darles consejos sobre belleza, salud, sexualidad explícita, relaciones y muchas otras cosas.

Ayudó en el crecimiento de la revista que cuenta hoy en día con varias franquicias en diferentes países.

Cosmopolitan es publicada en 32 idiomas y llega a más de 100 países.

Así las cosas, Helen fue un antes y un después para la revista en Estados Unidos y es considerada “el icono de la revolución sexual americana”.

En su despacho, en Cosmopolitan, con paredes forradas de seda rosa y moqueta de leopardo, Brown conservaba un cojín con una leyenda inequívoca:

“Las chicas buenas van al cielo y las malas van a todas partes”.

Un epitafio inmejorable para la mujer que transformó para siempre la sexualidad de la mujer y construyó su carrera en torno a ella*.

*Muere Helen Gurley Brown, la mujer que prendió la chispa de la revolución sexual