¿Por qué si soy hetero me pone el sexo homosexual?
Es curioso que una de las preguntas que más me hacen personas heterosexuales, tiene que ver con este tema.
Las personas tienen mucho miedo de tener fantasías, o descubrir que les gusta más el porno homosexual que el “normal”. Porque piensan que de la noche a la mañana se pueden transformar y cambiar sus preferencias sexuales.
Y te voy a decir una cosa. Puedes sentir que la atracción sexual no coincide con tu orientación sexual, y esto no significa que estés enferma o que te pase algo malo.
Esta situación es más normal de lo que imaginas y le sucede a muchas personas. Sin embargo, también es normal que la situación genera dudas sobre la propia identidad sexual.
Tener una sexualidad plena y sana implica, entre muchas cosas, aceptarse y quererse tal y cual uno es
La orientación sexual, sea homosexual, heterosexual, bisexual, o cualquier otra que exista en la actualidad, se queda muchas veces incompleta cuando tratamos de describir la cantidad ilimitada de gustos y preferencias sexuales que podemos tener los seres humanos.
Por lo cual, puedes experimentar deseo por ambos sexos, sin que esto indique que ahora has pasado de ser heterosexual a homosexual o bisexuales. Tu orientación sexual no cambia por más que tengas deseos por personas de tu mismo sexo.
Aunque también hay que decir, que para muchas personas homosexuales, este fue el primer indicador de que sentían preferencia por personas de su propio sexo.
Si nos ponemos un poco técnicos, podemos decir que la orientación sexual se define cuando se tiene súper claro por quién nos sentimos principalmente interesados, aunque esto no atañe solamente a un nivel sexual sino también emocional.
Es importante recordar, que todo ser humano experimenta muchas cosas a lo largo de su vida, somos personas curiosas y puede ser normal que cambie nuestra orientación sexual en algún momento.
Es por este motivo que es normal, en la adolescencia sentir curiosidad y ganas de experimentar. Aunque también es cierto que en la actualidad se ve en personas mayores de 30, casi 40 años.
También es cierto que para otras personas su orientación sexual la han tenido clara desde siempre y nunca han tenido curiosidad o deseo de experimentar otras cosas.
Si te causa curiosidad, y quieres tener más claridad sobre cuál es tu orientación sexual o cuáles son tus fantasías, puedes responder preguntas como:
- ¿Qué personas son las que suelen atraerte sexualmente? ¡Descríbelas!
- ¿Qué cosas activan tu deseo y placer?
- ¿Describe tus fantasías sexuales?
- ¿Con qué personas te gustaría tener relaciones sexuales hoy?
- ¿Con qué tipo de persona te imaginas compartiendo tu vida?
- ¿Cuál ha sido la experiencia más loca (o fuera de lo común) que has tenido a nivel sexual?
La orientación sexual no es algo que cambie tan fácilmente como puedes imaginar o creer. De hecho, algunos profesionales consideran que no es para nada invariable.
Aunque muchas personas, a lo largo de la historia, han tratado de moldear el deseo sexual de las personas y la realidad es que no es algo que se pueda hacer, por más que lo quieras hacer. El deseo sexual es algo que hace parte de nosotros y se va descubriendo a medida que vamos creciendo y madurando.
La identidad sexual la definen no solamente los pensamientos sino también las emociones, deseos, conductas y la forma en que vives tu vida.
Ten presente que un solo pensamiento nunca va a definir lo que eres ni lo que te gusta a nivel sexual.
No te creas tan especial, pues no eres la única persona que tiene este tipo de fantasías. Según una estudio de PornHub Insight resulta que los gusto sexuales de las mujeres, no suelen coincidir con su orientación sexual, cuando buscan pornografía. Pues la mayoría de mujeres heterosexuales consumen pornografía homosexual. Por ese motivo los vídeos lésbicos suelen ser los más buscados por las mujeres en Internet.
Si deseamos tener una buena salud sexual es importante empezar por aceptarnos tal y como somos, eso incluye con nuestras fantasías, deseos y preferencias sexuales.
La variedad que existe sobre nuestros deseos e intereses no debería ser algo que nos limite, todo lo contrario, es algo que nos enriquece y nos hace únicos.
